No pintaba nada bien el estreno de abc Wicked City y tras visionar el primer capítulo podemos afirmar que estábamos en lo cierto. La serie transcurre en Los Ángeles en 1982 donde actúa un asesino en serie y en el que se verán inmiscuidos policía e incluso periodistas que jugarán un papel protagonista. Tras este planteamiento inicial no hay que buscar más allá, ni segundas lecturas, ni crítica social, sino simplemente un thriller más, elaborado con muy poca habilidad y en el que apenas podemos resaltar puntos positivos.
Uno de los pocos puntos positivos que hallamos en la serie es la selección de temas musicales durante la emisión de su primer capítulo, una selección musical propia de la época. Sin embargo este punto positivo no es del todo atribuible a sus creadores, pues elegir una buena recopilación de temas no es tarea complicada, y si uno quiere escuchar una lista de hits de los 80s siempre puede tirar de Spotify y ahorrarse toda la paja de relleno del capítulo.
La trama presentada destaca por su escasa singularidad: un asesino en serie que encuentra en los crímenes que comete una vía de escape a los traumas de su pasado y que encontrará su alter ego en quién menos se lo espera: una madre soltera. Tras la busca y captura del asesino irá un cuerpo de policía que intentará detenerlo antes de que cometa su próximo asesinato. Destaca una tercera figura en esta historia, la de una joven periodista que empieza en el mundo de la información. Y es esta tercera figura la mayor nota de color en toda esta trama gris, pero su intensidad es tan limitada que no es suficiente para despertar un interés mayor. A todo ello hay que sumarle la predictibilidad en todo su tejido narrativo que no llega a sorprender en ningún momento al espectador.
En cuanto a los personajes en Wicked City dejan mucho que desear. Vacíos de cualquier atractivo el único mínimamente interesante es el que da vida Erika Christensen, un personaje que puede tener cierto interés, un personaje que esconde su verdadera personalidad tras su papel de madre y enfermera. Nada que ver con el papel de de Ed Westwick, que da vida a un personaje trillado hasta la saciedad en la ficción televisiva, el de asesino en serie con una infancia trágica que le lleva a ser quien es de adulto. Otro tanto pasa con la pareja policíaca, en el que encontramos el típico dúo que no se soportan pero que están obligados a trabajar codo con codo.
En definitiva, Wicked City una serie que podemos decir desde ya que su futuro no irá más allá que el de esta primera temporada. El resultado final surge tras utilizar el mismo molde que se emplea para dar forma a decenas de series del mismo género en la televisión norteamericana. Un producto televisivo que no merece la pena seguir gastando nuestro tiempo en él.
Promo de Wicked City
3.5
SUSPENSO
Una serie policíaca más que no aporta nada y en la que los personajes no transmite ningún tipo de credibilidad ni cercanía. La trama es predecible y poco llamativa.