Ya estamos aquí. Segundo viernes de #viernesdeepicaycienciaficcion, hoy hablaremos de esta nueva, y corta, producción de la NBC. Buenas vibraciones daba esta producción en sus comienzos, pero finalmente no ha convencido ni a la audiencia ni a la crítica americana, ya que, por el momento no la podemos visionar en España. Serie basada en el mundo fantástico creado por Bram Stoker, en su obra “Drácula”, allá por 1897, la cual ha devenido en multitud de obras tanto literarias como fílmicas. Es de recibo que, entre todas las obras emanadas del universo creado por el irlandés Stoker, debemos encumbrar el largometraje de Francis Ford Coppola, que en 1992 asombró al mundo, y obtuvo tres Oscar con una película espectacular, considerada una de las mejores adaptaciones.
Casi a punto de terminar la emisión en Norteamerica de esta nueva producción de la cadena NBC, todos los datos y rumores apuntan a que no habrá una segunda temporada de Drácula. Terminarán de emitirse los capítulos restantes en el prime time de los viernes, y mucho me temo que se cerrará el proyecto.
Por mucho que tengamos en cuenta una posición desfavorable en la parrilla televisiva, y que es una producción para un público no muy generalista. No es suficiente para justificar las malas audiencias obtenidas, que para más catástrofe, han ido disminuyendo a cada capitulo emitido. En cifras, el primer capitulo tuvo una audiencia en USA de 5 millones (1.8%) y de 3 millones (0.9%) en el cuarto y hasta el momento, último capitulo emitido.
Encontramos algunos detalles que, en principio, pueden conllevar que tanto la crítica como los espectadores no se “enganchen” a la serie. Personalmente el detalles que más me ha dejado en fuera de juego es que Van Helsing y Drácula, sean aliados. Que el doctor neerlandés sea el que despierte a Drácula de su olvido, no gana, en principio, muchos enteros ante los fans y la crítica.
Otro de los aspectos que deberían cuidar más en las escenas de exteriores, son los escenarios y ubicaciones, pues se nota a leguas que son decorados prefabricados o estudios, y eso da muestra del poco cuidado y profesinalidad de las producciones.
Las actuaciones tienen un nivel aceptable. Aunque nos encontramos a un Drácula más cerca del imaginario colectivo de Dorian Grey, que del tradicional Drácula. Cambio que aceptamos con sumo gusto en pro de una trama diferente, y buena dinámica narrativa. Dejando este cambio de perspectiva en barbecho, observamos que el resto de interpretaciones oscila más entre sombras que entre luces, aunque ninguna desentona negativamente.
Especialmente duro ha tenido que ser el batacazo para Jonathan Rhys-Meyers (Drácula), que tras el gran éxito que obtuvo en Los Tudor, volvía a la pequeña pantalla con esta producción, que prometía mucho, pero que no ha terminado de coger altura. Meyres, que estuvo soberbio como Enrique VIII, así como en otros papeles en su larga carrera, no termina de estar en buena sintonía con este milenario personaje.
Trama que desarrolla la alianza entre Van Helsing y Drácula para eliminar a una misteriosa Orden del Dragón. Dicha Orden busca, lógicamente, todo lo contrario, acabar con los vampiros. Así pues, presentados los archienemigos, sólo queda desarrollar subtramas que nos sirvan de hilos conductores, como los negocios en el sector energético con una energía revolucionaria o temas de la alta sociedad británica del siglo XIX.
Aunque con buen ritmo narrativo, ni la trama ni la producción en sí, son tan revulsivas para volver a levantar pasiones y mantener a los espectadores pegados al televisor, tal y como hemos visto en otras producciones en estos últimos años. Lo ocurrido a esta serie, ya lo hemos visto en otras ocasiones, y en la mayoría de las veces con los mismos resultados negativos.
Para terminar esta semana os dejo varias Recomendaciones sobre tématica fantástica-vampírica, la primera como no podía ser de otra manera, el libro de Bram Stoker, “Drácula”, el cual no puede faltar en ninguna biblioteca personal. Respecto al mundo audivisual, la pelicula de Coppola, basada en el libro antes citado. Y en el apartado de series: Crónicas Vampiricas y True Blood, ambas basadas en novelas, y ambas también con gran número de seguidores tanto USA como en España.