
Nurse Jackie, más tóxica y nociva que nunca
Como decía en mi review del comienzo de la sexta temporada de Nurse Jackie, ella ya sabía que vivía tocando fondo y lo hemos podido ver en cómo la enfermera que sin ser enfermera no es nadie, ha ido hundiendo a todas las personas que han estado a lo largo de la temporada alrededor de ella. Todos, excepto a Eddie, aunque también guardo mis dudas al respecto.
La serie que se ha ido con una renovación para una séptima temporada, pidiendo que sea la último, ha mostrado síntomas de cansancio desde un primer momento y el protagonismo de nuevos personajes han desviado nuestra atención, pero al final del camino, cuando Jackie se ha quedado sola, hemos sido capaces de discernir que su personaje no tiene el magnestimos del pasado.
No vamos a entrar en asuntos de análisis muy profundos, nuestras críticas no son así, pero lo que muchos críticos coinciden en que la comedia amarga y el realismo de las situaciones de mentira alrededor del personaje, convirtieron la serie en única. Esas características siguen estando, pero quizás demasiado poco visibles bajo la superficialidad de una drogadicta demasiado convincente, al menos, durante seis temporadas. Como la misma Zoey le decía, «yo creía en ti»
Es, cuanto menos, curioso que en el hospital tardaran tanto en darse cuenta, pero lo es más que todos acogieran su rehabilitación tan bien. No he vivido nunca con adictos tan de cerca, pero supongo que sí percibes ciertas cosas diferentes que la gente corriente no hace. Es por eso, que considero a Nurse Jackie, más tóxica y nociva que nunca. Ha tramado una telaraña a su alrededor donde todo el mundo queda encerrado y nadie escapa. Si lo hacen, lo harán dañados.
Pero, no todo es Jackie. Me siguen sobrando algunos secundarios como la Doctora Carrie Roman (Betty Gilpin), el policía ya ex de Jackie, Frank (Adam Ferrara) y el Doctor Cooper (Peter Facinelli) La primera no aporta nada, sigue siendo un relleno sin más que aunque le hayan dado un programa dentro de la serie, sigue sin aportar nada más que un cuerpo bonito. Frank ha dado buenos momentos, pero su excesiva ingenuidad no ha sido muy creíble. Diría que el personaje de Frank no ha sido muy bien creado. Por último, Cooper, ese doctor que me sobra hace unas temporadas y que sus tramas de relleno (como la del esperma) no tienen ni vis cómica y carecen de sentido lógico.
Así y todo, volvemos a vivir patrones que ya tuvimos en otras temporadas, por ejemplo, con Charlie Cruz.. En la presente temporada hemos tenido a una robaescenas particularmente buena de la mano de Julie White, que encarnaba a una inmensa Antoinette. De hecho, el capítulo 6×10 de Nurse Jackie podemos decir que es el mejor de la temporada y esa cena calculada por Jackie para ingresar a ésta en el rehab, la mejor de todas y que nos indicaba que nada ni nadie se interpondría en su camino.
Nadie, excepto la fabulosa esta temporada Ruby Jerins en el papel de Grace, que eclosiona siendo una actriz fabulosa y con bastantes registros. Ser la hija adicta de una adicta no tiene que ser nada fácil y tras aceptar esto, parece que no volvió a probar nada, pero cuando en la boda de su padre (acierto de la sexta temporada en la relación de Kevin) su madre lleva a un novio que era su traficante, todo explota. Las consecuencias las veremos en la próxima temporada, con una posible entrada en la cárcel de Jackie y con posibles cargos a presentar por la nueva mujer de Kevin. Tremendo, ¿eh?
A pesar de todo, Showtime sigue apostando por la serie y desde aquí seguiremos hablando de ella siempre que tengamos la posibilidad, porque aunque ya no siga siendo lo mismo, Nurse Jackie sigue siendo una joya minoritaria de la televisión.
Review Overview
6,5
BUENA
Una temporada donde la autodestrucción personal y de la gente que la rodea ha sido la trama principal, los secundarios han ayudado a aguantar una temporada predecible, pero irremediable