
Crítica de How I Met Your Mother: Un final a medias
Hace más de una semana que pudimos ver el final de How I Met Your Mother, posiblemente la comedia con más seguimiento a nivel global con permiso de The Big Bang Theory, y después de varios días pensando, reflexionando y valorando ese final todavía tengo sentimientos encontrados respecto a él. No por el final en sí, que considero que es el que siempre estuvo en el horizonte hasta que nos presentaron a la madre, sino por el momento en el que ha llegado. Y para eso quiero hablar primero de su novena y última temporada a nivel general.
Esta novena temporada ha traído consigo una estructura totalmente diferente a la que nos habíamos encontrado hasta ahora, ya que a pesar de ser 22 capítulos, en realidad siempre fueron los 3 días previos a la boda de Barney y Robin. Una apuesta arriesgada pero que creo que en términos generales ha funcionado bien y le ha dado un toque de aire fresco y diferente a pesar de que en algunos momentos parecía que iba a ser imposible mantener ese ritmo durante toda la temporada. Al final, una temporada que ha mejorado lo que habíamos visto en las anteriores precisamente por eso, por la novedad de la estructura y la novedad que despertaban las situaciones a las que se enfrentaban allí, en ocasiones bastante diferentes de las de siempre. El hecho de comprimir 3 días en 22 capítulos contrasta muchísimo con los casi 20 años que transcurren en el último capítulo doble, y es una de las razones por las que se puede argumentar que esta temporada se ha dado demasiada importancia a algunas cosas y muy poca a otras.

Durante esta temporada hemos podido cerrar muchas tramas que se arrastraban desde hace tiempo, desde la apuesta de Barney y Marshall con las bofetadas hasta la entrega del medallón de Robin por parte de Ted, pero siempre sin olvidarnos de lo que realmente nos interesaba a los espectadores: conocer (por fin) a la madre. El personaje de Cristin Milioti ha conseguido lo imposible, gustar a todos los espectadores a pesar de la enorme presión que había sobre su personaje, un personaje que llevábamos 8 años esperando y al que se miraba con lupa. Precisamente en ella recae lo peor del capítulo final, algo que se veía venir desde hacía varios capítulos (de hecho, hay quien ya lo imaginaba desde hace algunas temporadas) y que finalmente ocurrió, dando pie al final que muchos estuvimos esperando durante toda la serie hasta su última temporada.
Y ese es precisamente el problema que le veo al final. Tracy, la madre, muere de una enfermedad varios años después de casarse con Ted, que afirma que vivió con ella los mejores años de su vida. Por esa razón les cuenta la historia a sus hijos, pero cuando termina su hija Penny se da cuenta de que en realidad la madre aparece muy poco en la historia. La historia siempre fue sobre Robin, y demuestra que a pesar de los años, a pesar de haber vivido la historia más bonita que podía haber tenido, 6 años después de la muerte de Tracy todavía quiere intentarlo con Robin en un momento muy distinto al que se encontraban en sus primeros años. Sus hijos evidentemente le dan permiso porque Ted ha demostrado quererla mucho a lo largo de su la historia que ha contado, así que Ted se planta en casa de Robin, trompa azul en mano, para pedirle otra oportunidad.

Para llegar a ese momento nos encontramos con otro de los grandes fallos del final de How I Met Your Mother: la ruptura de Barney y Robin. Esa pareja siempre tuvo altibajos, y entraba dentro de lo esperable que pudieran divorciarse o incluso no llegar a casarse. El problema es que centran 22 capítulos en una boda que se ventilan en el capítulo 23 y en los primeros 10 minutos. Se le da una importancia a esa boda que finalmente no tiene, y da la sensación de que hemos estado perdiendo el tiempo viendo la evolución de Barney y Robin para que después los dos volvieran a ser las mismas personas que eran 3 años atrás. El personaje de Barney sí consigue sentar la cabeza en una de las escenas más bonitas que he visto, cuando afirma haber conocido a la mujer de su vida en una hija que le llega de rebote después de cumplir su mes perfecto. Después no sabemos nada de eso, de quién era la hija, si Barney se junta con la madre (lo dudo) o qué relación tiene después con la niña, pero eso es lo de menos. En cambio Robin vuelve a ser prácticamente la misma Robin que conocimos en la primera temporada, esa reportera que quería triunfar en el mundo de la comunicación y hacerse un hueco en los medios más importantes, incluso a nivel internacional.
Es ahí donde el final de How I Met Your Mother ha flaqueado, un final que les quita a los personajes la evolución que tanto tiempo les había llevado. Se puede estar más o menos de acuerdo con la muerte de la madre y de cómo se ha llevado, se puede estar más o menos de acuerdo con la recaída de Ted al final para volver con Robin, pero es ese tratamiento de los personajes lo que ensombrece el final. Además, muchos espectadores (entre los que me encuentro) están indignados por el tratamiento que se ha dado a La Madre. Después de conocerla, tener la primera cita más bonita que ha tenido Ted, prometerse, casarse, tener dos hijos y vivir 7 años felices, la madre enferma y desaparece para el espectador, tal cual. Después de habernos encariñado tanto con ella, se la han quitado de encima como si no importara. Realmente, para lo que ha sido el final, no importaba la madre, pero para el espectador había sido el centro de atención durante toda la última temporada. Agradezco que hayan evitado el baño de lágrimas de verla morir y ver a Ted sufrir por ella, pero ha faltado alguna escena más en la que ver esa progresión.

Respecto a la elección de Ted de intentar volver con Robin considero que es el final que siempre esperamos casi todos hasta esta última temporada. Es decir, siempre quisimos y creímos que Ted acabaría con Robin. Incluso llegamos a pensar que Robin sería la madre, quizás adoptiva, quizás postiza por todo eso del “tía Robin”, pero siempre estuvo ahí ese final. El problema es que ESE final ha llegado tarde, cuando ya habíamos conocido a la madre y queríamos que fueran felices para siempre. Para mí la última oportunidad para volver a juntar a Ted y Robin fue minutos antes de la boda, cuando Robin tiene dudas sobre su boda con Barney y le propone a Ted fugarse juntos, a lo que Ted le contesta que “ya no la quiere como antes”. Era un cierre perfecto para su historia, un cierre que tampoco supieron mantener al final.
De Lily y Marshall poco se puede decir. Siempre han sido los personajes más estables de la serie y los más coherentes con ellos mismos, algo que han mantenido hasta el final, cuando Marshall finalmente conseguía ser juez y aumentaban la familia una vez más para convertirse en esa familia casi ejemplar que siempre fueron. Se agradece también el detalle que tuvieron de contar el final para muchos personajes que habían ido apareciendo a lo largo de la serie y a los que perdimos la pista. Ted comenta que aunque las relaciones con la gente siempre se ven afectadas cuando uno forma una familia, él siguió la pista a algunas de esas personas simplemente para saber cómo les iba en la vida, y es ahí cuando supimos lo que pasaba en el futuro con esos personajes. Y algo que sí le recrimino a este final es el poco peso del grupo como tal. Como bien dice Ted, se pierde el contacto con los años, y no han hecho más que mostrarnos la realidad a la que se enfrenta casi todo el mundo cuando forma una familia, pero en una serie que siempre ha girado entorno a la amistad y a un grupo de personajes que compartían prácticamente todo, se ha echado de menos verlos unidos, como grupo, en este final.

Entonces, ¿me ha gustado el final? Sí. ¿Ha sido el final adecuado para el momento en el que la serie se encontraba? No. Este mismo final algunas temporadas atrás (al final de 8ª me valía) habría sido mucho mejor, pero lamentablemente nos lo han dado ahora. Para mí el final idóneo de la serie siempre será el momento en que Ted les dice a sus hijos: Y así es como conocí a vuestra madre. Un final triste porque la madre no está pero que le da realismo a la serie, ya que la vida no siempre es de color de rosa y a veces pasan estas cosas.
Aun así, me quedo con los buenos momentos que la serie me ha dado a lo largo de toda su trayectoria, que no son pocos. Y de su final creo que lo más destacable es el momento en que Barney conoce a su hija, como ya he dicho una de las escenas más tiernas que he visto en mucho tiempo. Ha habido más escenas bonitas y tiernas, como esa en la que Tracy le dice a Ted que está embarazada, o en la que Lily y Marshall dicen que esperan otro hijo, algo que Barney había advertido ya por los típicos cambios del embarazo en Lily. Seguramente pasará tiempo hasta que otra comedia se vuelva tan masiva como esta, sólo hay que mirar los más de 13 millones de espectadores y el 5,4 de rating que obtuvo en su final, su propio récord histórico, y mientras tanto seguiremos buscando una que rellene el hueco que nos deja How I Met Your Mother.
Review Overview
6,9 - BUENO
BUENO
How I Met Your Mother terminó con un final agridulce, un buen final coherente con lo que la serie siempre estuvo contando pero que se opone a los deseos de muchos espectadores que habíamos acogido a La Madre con los brazos abiertos.
Y Q paso con el papa de barney?? Alguien supo? Y además de que murió la madre? Y que mal Q barney y robin se divorciaran!
Suscribo palabra por palabra lo que has escrito. Quizá han estirado demasiado el chicle, como hace tiempo le lleva pasando a The Big Bang Theory, pero es el mejor final que le podían haber dado. Todos han acabado con un final feliz, incluso la madre, que antes de morir sabía que tenía a Ted. Pasará mucho hasta que otra comedia nos dé unos personajes tan carismáticos como How I Met Your Mother.
Es que mantener ese macguffin (el de conocer a la madre) durante tanto tiempo les ha pasado factura. Incluso teniendo 9 temporadas, si la madre hubiera aparecido antes y hubieran ampliado ese final a varios capítulos, preparándonos para lo que venía y matizando bien algunos temas, creo que habría sido un mejor final, pero no pude evitar pensar cuando lo vi que parecía precipitado, y para una comedia que se supone que desde el principio supo cual sería su final no dice nada bueno.