¿Hablas de Kant entre amigos en lugar del último escándalo de las Kardashian? ¿Tienes como teoría humanística básica el utilitarismo de Hume? ¿Desafías en un bar de cerveza artesanal a que te digan diez canciones de Nirvana? ¿Piensas que la civilización anda tan perdida como los conceptos demográficos de Malthus? Pues sin lugar a duda esta batería de ficciones te ayudarán a equilibrar tus chakras. Presta atención a estas 10 series para hacerte con el título de hipster.
Portlandia
Hace un año que acabó, pero Muchas personas siguen llorando el excesivo tiempo entre temporada y temporada con un café de seis euros en un Starbucks. Una serie que se ambientaba en la alternativa y progre Portland, donde todos los estilos urbanos se dan cita. Además, qué mejor que para ser hipster que reírse de sí mismo. Jonathan Krisel, Fred Armisen, Carrie Brownstein y Lorne Michael son la parte creativa detrás de ‘Portlandia’, con orígenes en el irreverente ‘Saturday Night Live’.
Girls
La comedia de la que muchos hablan y pocos ven, por desgracia. La llamada niña bonita de HBO, Lena Dunham, que hace lo que quiere, como quiere y porque lo quiere, nos cuenta de forma pseudobiográfica la vida de varias maduritas neoyorkinas. Los catetos no son bienvenidos y las referencias culturales son parte del relato. Siempre nos quedará ver sus episodios en el garito de moda mientras hablamos de su humanismo y fidelidad a la desoladora realidad urbana.
Unbreakable Kimmy Schmidt
La adorable Kimmy llegó y emocionó a una legión de ávidos espectadores con ganas de historias con las que conectar y empatizar, después de la decepción tras la cancelación de ‘Pushing Daises’ años atrás. La liberación, la introspección y la analítica de la inteligencia emocional del personaje es comparable con el problema del auto-conocimiento en la filosofía trascendental de Kant.
Inside Amy Schumer
La forma de romper el techo de cristal de las cómicas en Estados Unidos, si dejamos atrás a esa hereje nada graciosa y nada transgresora llamada Chelsea Handler, que además no representa al género. Un ejemplo sobre cómo es la liberación femenina en pleno siglo XXI, en un terreno dominado durante décadas por rancios referentes como Bill Cosby, Bertín Osborne o Arévalo.
30 rock
No hay comedia más buena en toda la historia que la de Tina Fey y, la verdad, nunca entendimos el motivo de que no le llovieran más grandes premios en todas las categorías posibles, como la de vestuario. Algo que nos indica cómo es de chusca las organizaciones y jurado detrás de los Golden Globe o los Emmy. Y, por cierto, ¿a qué cenutrio se le ocurrió traducir esta obra maestra audiovisual como ‘Rockefeller Plaza’?
Wilfred
El enésima éxito de Elijah Wood y en la que quedan diluidas las observaciones de Aristóteles acerca de la superioridad del ser hombre sobre el ser animal. Un goce continuo y una comedia lista para ser consumida con un hummus y una bruscheta.
Deutschland 83
Vayámonos a la Berlín separada en cuatro territorios y al trabajo de un espía que no tiene acceso a las tecnologías y moderneces. Toda una liberación, como cuando nos desintoxicamos de esos egospammers de Intagram. Una historia sobre cómo el yugo occidental ejercía labores de presión y aislamiento al pueblo gobernado por unos comunistas. Una obra entre el videojuego y el postureo.
Trapped
El último hito en Islandia, que no hizo llorar a Spielberg pero que transmite emotividad a raudales. Una serie en la cual las reflexiones sosteniendo una taza de café o abanicándose, emiten diversas alegorías sobre el calentamiento global, el aislamiento en una isla nórdica o la pureza de la población local. Gotas de sufrimiento y de indiferencia dirigidas con suma maestría, como solo saben hacer los islandeses, que nos traen un drama de disfrute máximo.
El piso
Es una webserie, pero puede entrar en la categoría por la expansión de los procesos de creación audiovisual y su posterior deconstrucción. Una forma de reinterpretar el mundo de la serie moderna. Veremos aquí las inquietudes artísticas y sociales con el toque de obra de autor. Catalán.
Hipsteria
Como la anterior, una webserie que intenta mostrarnos la realidad del colectivo hipster, las dificultades que se tiene para conseguir la última novedad literaria publicada por una librería independiente del extrarradio o los maratones de David Simon necesarios para estar al día de todo lo bueno y que jode al espectador medio. Y qué mejor que lo cuente una pueblerina que viaja a Madrid para hacer una vida en un piso en el barrio de Malasaña de la mano de la estupenda y musical MTV.
¿Tienes alguna que añadir más a estas 10 series para hacerte con el título de hipster? Estamos esperando tus observaciones en los comentarios.