Hace unos seis años (2011) conocí a Álex Pina, el creador de ‘La casa de papel’. Estuve entrevistándolo en la presentación de ‘El barco‘. Mis primeras impresiones fueron las siguientes»la primera idea que tuvimos de El Barco fue que “algo diferente” llegaba a España. La ficción consiguió en su estreno 4.769.000 de espectadores y un 23,4% de cuota de pantalla, pero me he preguntado muchas veces, ¿dónde queda la premisa verdadera del final del mundo?«.
Tras cuatro temporadas con Mario Casas a la cabeza, Álex creó ‘Bienvenidos al Lolita‘, esa serie que se quedó a medio de muchas cosas y que debió mostrarnos un prostíbulo de verdad (¿no estaba preparada España para eso en 2014?). Después de su paso en solitario por ‘Kamikaze’, sin la ayuda habitual de Daniel Écija, volvió a trabajar en ‘Vis a vis’ y fue entonces cuando nos fijamos de nuevo en su ficción. Aunque también hay que añadir el mérito de Iván Escobar y Esther Martínez Lobato en esa maravilla que nos dejó con solamente dos temporadas. Hoy, en mayo de 2017, se pone al frente de ‘La casa de papel’ junto a Esther Martínez Lobato y otros como David Barrocal, Pablo Roa, Fernando San Cristóbal, Javier Gómez Santander y Alberto Sierra. Y bravo.
Eso que se intuía en 2011 sobre ‘El barco’ en cierta manera era cierto, había un intento de la ficción española por historias con menos duración, dirigidas a un público más concreto y con un mayor presupuesto, ha sido la prerrogativa que hemos escuchado en muchas ocasiones y que a pesar de que no siempre se cumple, sí podemos decir que todo esto se inició de una manera más o menos formal a principios de la década con ficciones como ‘Crematorio’, ‘Pelotas’ ‘Hay alguien ahí’, ‘Doctor Mateo’ y ‘Tierra de lobos’. Si bien algunas de ellas no marcaron una época en la televisión, sí se establecieron como producciones con un valor riesgo importante, ya sea por su función, la audiencia a la que iba destinada, la técnica detrás de ellas, u otros apartados.
Ahora, en 2017, un año en el que llevamos varios estrenos y regresos interesantes, miramos con más ojo que nunca lo que las cadenas españolas nos traen. El público mayoritario español, ese que consume en televisión lineal, ha ido aumentado las series que ven y ahora es más difícil colarles cualquier subproducto gracias a un mayor bagaje audiovisual. Su opinión es escuchada y medida en las redes sociales, que se han convertido a su vez en campo de cultivo para conocer de primera mano la percepción de las ficciones. De ese encuentro en 2011 tengo que decir que no me convenció mucho lo que me vendieron cuando vi el producto final, en 2017 puedo decir que sí. La experiencia y los fracasos son un campo necesario para hacernos crecer profesionalmente (a todos nosotros) y el error-acierto es muchas veces como la perfecta manera de mejorar.
Cuando hace unos años algunos huían de la ficción en España bajo el eslogan de «es una serie española, no le pidas mucho«, en elrinconTV nos sentíamos en cierta manera llamados a hablar de lo que se hacía en nuestro país. Ahora podemos decir que no nos arrepentimos, en los ocho años que llevamos online hemos visto muchas cosas, buenas y malas, pero saboreamos como el que más el dulce momento que vivimos. Últimamente podríamos destacar ‘Vis a Vis’, ‘El ministerio del tiempo’ o la más reciente ‘Sé quién eres’. Hoy es el turno de ‘La casa de papel’.
Producida por Atresmedia en colaboración con Vancouver Producciones, está protagonizada por Úrsula Corberó, Alba Flores, Miguel Herrán y Paco Tous. La primera escena de la serie es con un atraco en la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre de España. Los personajes que se nos presentan son El Profesor (Álvaro Morte) con una ejecución perfecta de los atracadores Tokio (Úrsula Corberó), Nairobi (Alba Flores), Río (Miguel Herrán), Moscú (Paco Tous), Berlín (Pedro Alonso), Denver (Jaime Lorente), Helsinki (Darko Peric) y Oslo (Roberto García). La historia narrará el atraco en 12 días y promete darnos muchas sorpresas.
Enfrentarse a una serie «virgen», como ha sido mi caso, tiene a veces elementos muy positivos. No había estado en la presentación oficial en Madrid y Antena 3 no mandó el screener a los blogs y webs especializadas como hacen otras plataformas como Netflix, HBO o COSMO, así que el visionado de la serie fue como todo el mundo…a las 22:40 de la noche del pasado martes. La capacidad de sorpresa, por tanto, aumentó. ‘La casa de papel’ tiene en su presentación numerosos aciertos, como la fotografía, con unos planos que recuerdan a películas como ‘El lobo de Wall Street’ o ‘Ocean’s Eleven’, puro Hollywood. O un efectismo en la dirección que prefiere el entretenimiento por encima del guion, y bienvenido sea. O como algunas de las actuaciones, como un soberbio Pedro Alonso o una contenida Úrsula Corberó.
Y es que ‘La casa de papel’ es atrevida en ciertos aspectos. Ha optado por imprimir ritmo a su presentación, que aunque perdió fuelle en algún momento, supo recuperar pronto. Y también en los colores añadidos en posproducción, optando por los tonos grisáceos y rojos, dotando al relato de una fotografía cuidada desde la técnica.
¿Cómo se hizo el primer capítulo de ‘La casa de papel’?
Pero no todo es positivo en ‘La casa de papel’, ya que se siguen arrastrando elementos clásicos negativos de la ficción española como la excesiva duración de los episodios (80 minutos en este caso) o la recurrente voz en off, tan de moda otra vez. Pero estamos dispuestos a perdonar ciertas cosas si nos hacen adentrarnos en un historia relevante.
Por ahora, aquí han ganado a un adepto, pero que no esperen a que me acueste a las 1:00 para ver el final de sus episodios, todos tenemos compromisos por la mañana…y un despertador. El prime time en España debe cambiar ya, aunque seguiré pensando unos días más el «quiero las máquinas funcionando las 24 horas, como si esto fuera una rave de Pocholo. Chiki pun chiki pun»
Tráiler de ‘La casa de papel’
Ayer me vi el primer capítulo y es una españolada con una caja y envoltorio preciosos