Please like me: crítica

Please like me: crítica

Please like me es otro salto de la televisión australiana hacia el hemisferio norte (en este caso ABC2), de esas series con un sello de identidad muy marcado pero con situaciones universales que hacen del audiovisual aussie un referente a tener en cuenta fuera de los mercados habituales de Estados Unidos y Reino Unido, como lo son Italia, Argentina, Francia o España en algunos casos.

Así, Please like es algo así como una serie hecha a medida. En este caso Josh Tomas es el guionista y a la vez intérprete de la serie, pues en un comediante. Así, la serie nos retrata a Josh, un chico cínico y egocéntrico que reconoce que es homosexual cuando su novia. Mientras descubre su nueva sexualidad con Geoffrey y se ajusta a la nueva dinámica de su grupo de amigos, también se encuentra ante una situación un tanto complicada…ya que tiene que hacerse cargo de su madre y volver a casa para ello porque se ha intentado suicidar y lidiar con los problemas de la nueva relación de su padre. Por si esto fuera poco, parece que su ex novia y su mejor tienen una conexión sexual.

Quizás Please like me se centra demasiado en Josh Tomas, ese cómico australiano que a veces parece tener poco talento y hace brillar la comedia por su orientación sexual, sin más. Eso funciona también en Girls (en este caso con el sexo en un tipo de mujer urbana y con empleo basura), con una protagonista que eclipsa todo y a todos y donde parece que las series a medida son para ensalzar al protagonista solamente. Pero, supongo, las series de autor son así y Please like me no podría ser menos.

Please like me cuenta por ahora (2014) con dos temporadas emitidas de diez episodios cada una y no se conoce todavía ningún canal de habla hispana que haya comprado los derechos de la serie. Además, ya está renovada para una tercera temporada.  Lo dicho, Please like me es una comedia una poco trágica o una dramedia en su más extenso vocablo, como lo puede ser la incomprendida Nurse Jackie. Si buscas algo diferente y más genuino, quizás aquí lo tienes.