Desde luego que el cine hollywoodiense tiene historias para dar y regalar a lo largo de su extenso desarrollo por el tiempo. La cuna del cine ha tenido grandes etapas en las que diferentes géneros han ido dominando la gran pantalla para deleite y también disgusto de los cinéfilos. Pero hay géneros que siempre están presentes y que en ocasiones no se repara en ellos. Y lo cierto es que han sacado del atolladero a varios directores de cine reputados cuando no sabían que giro darle a su producción para que ganar interés. Y ese es el mundo del juego, con el poker en el papel de protagonista principal.
Hay un dicho que dice que aprender idiomas es idóneo para ver cine, pues abre grandes horizontes. Se podría decir que el poker cuenta con un idioma propio, complicado de descifrar si no has jugado nunca o no conoces su funcionamiento. En eso se ha concentrado también esta clase de cine, en darle visibilidad y llegar al público mediante las emociones y la adrenalina de los naipes y las apuestas. Eso es sin duda lo mejor de las películas especializadas en la materia, que han dejado escenas para el recuerdo y que algunas entrarían perfectamente en un top mundial.
Rounders, Lucky You, Ocean’s Eleven o The Cincinnati Kid seguramente son producciones para echarles de comer aparte. Entre ellas forman una especie de grupo de élite de películas de póker que serán recordadas para siempre y pasen los años que pasen. Y si nos vamos a algunas de sus escenas puede que haya grandes aficionados a la cinematografía más actual que alucinarían en colores. Y como no está de más realizar pequeños repasos de vez en cuando, traemos precisamente una recopilación de las escenas más potentes de poker. Es posible que muchas te resulten familiares y otras que ni conozcas. Pero todas comparten un sabor especial.
Casino Royale
La saga del curioso personaje de James Bond no podía faltar en esta recopilación y menos en la primera entrega en la que el agente es interpretado por Daniel Craig. El personaje creado por Ian Fleming tiene que tratar de parar a Le Chiffre y evitar que gane un torneo de Texas Holdem con el que pretende financiar a una célula terrorista. Por eso es que les toca verse las caras en la mesa de juego, en una mano final cargada de tensión, miradas y puro poker.
Cuando al villano interpretado por Mads Mikkelsen no le queda más remedio que ceder los 155 millones de dólares en juego en el pozo por una escalera de color de Bond, este se marcha en silencio sabiendo la gran oportunidad que ha perdido. Su full house no fue suficiente en un ambiente donde el público se moría de los nervios ante tanto billete en juego. Irrepetible.
Rounders
Sin duda una de las películas insignia de cualquier comunidad de poker que se precie. De las primeras que se recomiendan y que cuenta la historia de cómo Mike McDermott pierde todo su dinero en una partida frente a un mafioso. La salida de su amigo Lester de la cárcel será el motivo perfecto para que Mike vuelva a reconciliarse con los naipes, con el objetivo de cambiar el mal resultado de aquella desgraciada oportunidad.
Y lo consigue en una partida para su recuerdo. Una mano final con mucho suspense y donde su enemigo Teddy piensa que vuelve a tener entre sus manos a un McDermott que trata de despistarle pasando en todo momento y limitándose a copiar a su contrincante. Una preciosa escalera hará que entre en cólera y pierda las nervios, algo poco recomendable en esto del poker.
Lucky You
Sin duda la escena más realista de todas la encontramos en la narrativa de Huck Cheever, un jugador profesional de poker que se desplaza hasta Las Vegas para disputar las series mundiales y donde proyectará los problemas con su padre, con el tratará de reconciliarse tras años de mala relación. La mesa final deja una escena de infarto donde Huck se enfrenta al jugador más enigmático y veterano de la partida, sin garantías de victoria.
La doble pareja del anciano es superada por un trío de treses del protagonista principal, que salva un auténtico match ball de cara a su objetivo. Desde luego que podría ser una mano cualquiera de un torneo televisado en la actualidad en la ciudad del pecado. El espectador puede conocer lo que hay detrás de las cámaras, además de la forma real de vivir el juego en vivo.
Molly’s Game
La más reciente de todas y polémica por el hecho de basarse en una historia real. Jessica Chastain interpreta muy bien a Molly Bloom, la diva organizadora de timbas de poker millonarias entre famosos de Hollywood que terminó investigada por el FBI. De la esquiadora profesional que se lesionó y tuvo que empezar desde cero no quedó mucho, más allá de los problemas con su progenitor.
La película muestra gráficos interesantes parecidos a los vistos en televisión sobre las manos de los jugadores en un torneo en vivo y la propia protagonista narrando los movimientos de los jugadores. Una buena forma de aprender y de observar como una mala racha puede llegar a condenar a un jugador por mucho dinero que tenga. De un full house en el flop que te da esperanzas a un full superior del adversario que te condena. Grandes enseñanzas sobre poker.